Esta compañía holandesa utiliza cáscaras de coco para evitar la tala de 200 millones de árboles al año
- Leonardo Antonio Islas Olavarrieta
- 1 feb 2020
- 2 Min. de lectura
Compartido por: Luis Fernando Heras Portillo
En estos tiempos, cuando nuestro planeta está en peligro debido a los efectos producidos por el cambio climático, por la contaminación y la destrucción de habitats naturales, surgen soluciones innovadoras de personas que combinan su creatividad con sus ganas de aportar ideas que la sociedad pueda utilizar en su día a día, como es el caso de la compañía CocoPellet, cuya historia nos comparte Luis Fernando Heras Portillo.
Anualmente, en el mundo se cosechan aproximadamente 74 mil millones de cocos, donde la cáscara es considerada un desperdicio, y termina siendo quemada, arrojada al océano o acumulada para crear un riesgo ecológico enorme.
Sin embargo, la startup CocoPallet está cambiando este paradigma al convertir las cáscaras de coco en una fuente de material reutilizable para reemplazar las tradicionales tarimas de madera por tarimas hechas de coco.
Esta compañía holandesa se ubica dentro de un nicho de la industria donde su producto representa una solución rentable para el transporte de carga a través de la innovación en el uso del coco.
Jan Van Dam, un investigador de la Universidad de Wageningen, fue quien ayudó a desarrollar esta tarima para CocoPallet, y asegura que es posible encontrar los medios necesarios para convertir los recursos comunmente desechados en algo útil para todos.
Inspirado en un antiguo procedimiento indonesio practicado por apenas algunas personas, Van Dam consideró que podía replicar este proceso y convertir las cáscaras de coco en algo que la sociedad actual pudiera aprovechar.
«Parecía un tablero de madera común y corriente» dijo Van Dam cuando un hombre indonesio le presentó el producto de coco. «Pero según este hombre, no estaba hecho de árboles talados, sino que era fabricado 100% con corteza de coco, la cáscara externa de la fruta».
El proceso es incluso más barato que el utilizado para talar madera y el diseño es práctico y duradero. La empresa estima que esta idea evita que se talen 200 millones de árboles anuales, ya que la industria de las tarimas es requerida en todo el mundo.
Una característica que las hace únicas es que son resistentes al fuego. «Gracias a su diseño, son fáciles de apilar, por lo que ocupan menos espacio, y son mucho más baratas», dijo Van Dam.
Vía Z6 Magazine
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